jueves, 15 de octubre de 2009

Un libro que hace tiempo quería encontrar:  Aire de las colinas. Cartas a Clara, de Juan Rulfo. Quién otro para escribir esto:

Se volvió muy flojo. Porque a todos los que les gusta leer mucho, de tanto estar sentado, les da flojera hacer cualquier otra cosa. Y tu sabes que el estarse sentado y quieto le llena a uno la cabeza de pensamientos. Y esos pensamientos viven y toman formas extrañas y se enredan de tal modo que, al cabo del tiempo, a la gente que eso le ocurre se vuelve loca.


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